Absuelto para evitar ser juzgado dos veces por el mismo delito
El acusado afrontaba 11 meses de cárcel por acosar con 54 wasaps a su exnovia pero le procesaron por enviar dos mensajes más
Nadie podrá ser juzgado dos veces por los mismos hechos. Esa
garantía legal llevó a la jueza de lo penal número 1 de Vigo a absolver
ayer de viva voz a un extranjero procesado por quebrantar la orden de
alejamiento y acosar mediante 54 mensajes de WhatsApp a su exnovia en el
2015 desde redes wifi. Sobre este caso ya había recaído una sentencia
hace un año pero el implicado iba a ser juzgado ayer por enviar otros
dos mensajes similares en las mismas fechas y que la Policía Local
descubrió tiempo después de la primera denuncia. Nadie se dio cuenta del
detalle hasta que el abogado dio la alarma.
La Fiscalía pedía inicialmente una pena de once meses de
prisión para el implicado por ser un reincidente pero al arrancar el
juicio el abogado alegó que su cliente ya había sido juzgado y
sentenciado en el 2016 por estos hechos. El Ministerio Público vio
probada la alegación y retiró los cargos inmediatamente.
El abogado invocó ante la jueza el principio conocido como non bis in idem
(nunca dos veces por lo mismo), una garantía del derecho que evita que
una persona se siente en el banquillo dos veces por el mismo delito, ya
fuese absuelto o condenado. En este caso, la Policía Local lo denunció
por unos hechos primero y luego hizo una ampliación del caso que fue
tramitada como un nuevo procedimiento. El abogado se percató de que el
delito se había duplicado y pidió la absolución.
El acusado fue condenado por el juzgado de violencia sobre
la mujer de Vigo el 16 de julio del 2015 como autor de los delitos de
acoso y quebrantamiento de condena o medida cautelar. La sentencia le
prohibió acercarse a la víctima a su casa, lugar de trabajo o zonas
frecuentadas por ella a una distancia de 300 metros o comunicarse con
ella durante dos años. La sentencia le fue notificada el mismo día.
Según el Ministerio Público, el acusado conocía que la
prohibición estaba en vigor pero acudió a ver a la exnovia a su
domicilio, donde pernoctaba. Para evitar las vigilancias por WhatsApp,
enviaba los mensajes desde lugares donde había wifi libre y gratuito.
Entre el 5 y 6 de agosto, le remitió 54 mensajes pero el juicio de ayer
solo se iba a centrar en dos de los envíos. En el primero, le decía que
iba a tener una línea segura, que solo iba a estar disponible cuando
tuviese wifi y que «ya está bien de que la gente se meta en la relación
de dos personas que se quieren».
En el segundo, pidió a su expareja que restableciese las
opciones normales del WhatsApp porque ella no le contestaba y se quejaba
de que había caminado casi kilómetro y medio «para nada». Añadía que
con la mensajería instantánea no se podía grabar mensajes de audio.
No hay comentarios:
Publicar un comentario